Fue un joven sorprendente que sufrió un mínimo de cinco heridas graves en su cabeza
La cara de una víctima de asesinato de hace 1.400 años está viendo la luz del día, ahora que los científicos han reconstruido digitalmente sus rasgos.
La víctima, un joven hombre picto, encontró un espeluznante final cuando fue brutalmente asesinado en lo que ahora es la moderna Escocia. Durante la excavación de una cueva en la Isla Negra, Ross-shire, en las Tierras Altas de Escocia, los arqueólogos encontraron los restos del hombre, colocados en una extraña posición con las piernas cruzadas con rocas que le clavaban los brazos y las piernas.
Los arqueólogos enviaron los huesos del hombre al Centro de Anatomía e Identificación Humana (CAHID) de la Universidad de Dundee, en Australia. El equipo de allí, dirigido por la antropóloga forense Sue Black, analizó los huesos e identificó las horribles lesiones que había sufrido el hombre, incluyendo cinco impactos que llevaron a la fractura de la cara y el cráneo del hombre.
Y luego, crearon una reconstrucción digital de su rostro, dijo Black.