Revelados los secretos de los lobos terribles de Juego de Tronos

El ADN forense revela que los lobos terribles son de su propia especie

Estas equivocado si crees que los extintos lobos terribles (Canis dirus) estaban estrechamente relacionados con otros lobos.

Un nuevo estudio, publicado en la revista Nature, muestra que los extintos lobos terribles (que se hicieron famosos en la serie de televisión Game of Thrones) eran solo un pariente lejano de los lobos de hoy, separándose de otros tipos de lobos hace casi seis millones de años.

"Los lobos temibles a veces son retratados como criaturas míticas, lobos gigantes que merodean por desolados y helados paisajes, pero en realidad resultan ser aún más interesantes", dice el coautor principal Kieren Mitchell, de la Universidad de Adelaide.

Un equipo internacional de investigadores del Reino Unido, Alemania, Estados Unidos y Australia descubrió que los lobos terribles eran tan diferentes de otras especies caninas, como los coyotes y el lobo gris, que probablemente no podían cruzarse entre sí.

"A pesar de las similitudes anatómicas entre los lobos grises y los lobos terribles, lo que sugiere que quizás podrían estar relacionados de la misma manera que los humanos modernos y los neandertales, nuestros resultados genéticos muestran que estas dos especies de lobos se parecen mucho más a primos lejanos, como los humanos y los chimpancés", dice Mitchell.

Después de analizar cinco genomas de lobo terrible a partir de huesos fósiles que datan de hace 13.000 a 50.000 años, el equipo pudo reconstruir por primera vez la historia evolutiva del lobo terrible.

No encontraron evidencia de flujo genético entre lobos terribles y lobos grises o coyotes, una ausencia de transferencia genética que indica que los lobos terribles evolucionaron de forma aislada de los antepasados ​​de la era de hielo de estas otras especies.

Si bien las diferentes especies se superpusieron, los investigadores sugieren que las profundas diferencias evolutivas significaron que los lobos terribles probablemente no estaban equipados para adaptarse a las cambiantes condiciones al final de la edad de hielo.

"Si bien los humanos antiguos y los neandertales parecen haberse cruzado, al igual que los lobos grises y los coyotes modernos, nuestros datos genéticos no proporcionaron evidencia de que los lobos terribles se cruzaran con cualquier especie canina viviente", dice Mitchell.

"Todos nuestros datos apuntan a que el lobo terrible es el último miembro superviviente de un antiguo linaje distinto de todos los caninos vivos".

Los investigadores sugieren que, a diferencia de muchas especies de cánidos que se cree que migraron repetidamente entre América del Norte y Eurasia, los lobos terribles evolucionaron únicamente en América del Norte.

"Se cree que la hibridación entre las especies de Canis es muy común; esto debe significar que los lobos terribles estuvieron aislados en América del Norte durante mucho tiempo para volverse tan genéticamente diferentes", dice el autor principal Laurent Frantz, de la Universidad Ludwig Maximilian de Munich, Alemania.

En cambio, basándose en el análisis genómico, los investigadores concluyen que tres linajes primarios descienden de la ascendencia compartida: lobos terribles, chacales africanos y un grupo que comprende todas las demás especies parecidas a lobos existentes, incluido el lobo gris.

En cuanto a las posibles explicaciones de por qué se extinguió el lobo terrible, una hipótesis es que debido a su tamaño corporal, el lobo terrible estaba más especializado para cazar presas más grandes. Cuando se extinguió esa presa más grande, el lobo terrible no pudo sobrevivir.

Sin embargo, con el análisis genético que muestra que los lobos terribles eran genéticamente muy diferentes, la coautora principal Alice Mouton de la Universidad de California sugiere que la falta de mestizaje también puede haber contribuido a su desaparición.

"Quizás la incapacidad del lobo terrible para cruzarse no proporcionó los nuevos rasgos necesarios que podrían haberles permitido sobrevivir", explica.

Mientras los investigadores se acercan a la comprensión de estas misteriosas criaturas, los restos fósiles, el análisis de ADN y un poco de ayuda de Game of Thrones ayudan a que su leyenda siga viva.

Artículo científico: Dire wolves were the last of an ancient New World canid lineage