Madre ñu no puede defender a su cría del implacable ataque de un leopardo

En algún momento del vídeo parece que la madre ataca a su propio hijo

Nota: Algunos espectadores podrían encontrar perturbador este material

Esta intensa y dura batalla fue filmada en vídeo por un joven turista en el Parque Nacional Kruger de Sudáfrica.

El leopardo fue visto inicialmente persiguiendo a un impala solitario, pero después que los antílopes hicieron una pausa para beber en el lecho de un río cercano, el gran gato encontró un blanco más fácil - o al menos eso parecía. Un joven ternero ñu descansaba cerca, lo que habría sido una presa fácil para el leopardo... si no hubiera sido por la poderosa madre de la cría, que no se estaba dando por vencida sin luchar.

"Yo estaba completamente conmovido! Yo no podía creer lo que estaba viendo, pero de alguna manera me las arreglé para filmar", recuerda Muhammed, de 12 años de edad, que grabó el vídeo y lo presentó a Latest Sightings del canal de YouTube.

Las cosas se vuelven particularmente brutales a medio camino del clip de vídeo, cuando parece que el ñu mamá está atacando a su propio bebé. La explicación más probable es que ella simplemente está tratando de conseguir que el ternero se ponga de pie en medio de la extrema tensión y la confusión de la situación. Las lesiones del ternero, probablemente, le impidieron ponerse de pie.

También podemos especular sobre si el comportamiento fue provocado por las continuas llamadas de socorro del pequeño. En un avistamiento en otro lugar, se observó una manada de cebras atacar una cría de ñu posiblemente debido a que sus fuertes gritos eran percibidos como una amenaza de seguridad. Suena triste, pero cuando el destino de su hato depende de los depredadores que pasan sin ser vistos, estar en silencio es una necesidad. En este caso, sin embargo, el joven era un intruso de otra especie, por lo que es imposible saber si aquí estaba en juego algo similar.

También vale la pena señalar que el vehículo de los turistas estaba un poco demasiado cerca de la acción, lo que probablemente añadió un elemento más estresante a lo que ya era una situación muy intensa.

Finalmente, el ñu madre logró ahuyentar al leopardo a un árbol cercano, pero el gato volvió a reclamar su comida poco después. "Yo estaba abatido porque parecía que el bebé sufrió durante mucho tiempo, pero mi hermana explicó que este es el ciclo de la vida, y parte de la naturaleza", dice Muhammad.