Insecto robótico volador utiliza la adherencia electrostática conmutable
Una vez que alza el vuelo un robot, también hay que encontrar una manera de hacer que aterrice. Almohadillas adhesivas, imanes, e incluso pequeños picos pueden ayudar.
Pero los diminutos robots tienen algunas herramientas únicas a su disposición, de acuerdo con un nuevo estudio.
Los investigadores han demostrado que un robot inspirado en el vuelo de un insecto del tamaño de una avispa que debutó en 2013 puede hacer uso de la llamada fuerza electrostática para adherirse a las superficies. Es la fuerza que hace que los objetos con carga opuesta se atraigan entre sí, la misma fuerza que hace que el pelo se encrespe al peinarlo.