Es posiblemente el peor desastre ambiental desde el derrame de petróleo de Deepwater Horizon de BP en 2010, y no será contenida en el corto plazo - por lo menos se necesitan unos cuantos meses más - ya que los trabajadores tienen que perforar a 2.600 metros (8.500 pies) para interceptar la base del pozo y tratar de contener el escape. Hasta el momento, sólo han excavado aproximadamente un tercio de eso. SoCalGas, una unidad de Sempra Energy, también ha tratado de contener la fuga en la superficie, pero no ha tenido éxito.

Los locales se han quejado durante meses sobre los efectos de la fuga, que incluyen dolores de cabeza y sangrado de nariz, pero los efectos de la contaminación a largo plazo probablemente serán aún más perjudiciales. Es imposible calcular el impacto ambiental en este momento, pero es seguro decir que esto es una enorme catástrofe. Los pozos de alivio llevarán cerca de cuatro meses construirlos y, si todo va bien (que es una si bastante grande en este momento), posteriormenre vamos a ser capaces de decir más sobre el daño.

"Es totalmente inaceptable tener una fuente de contaminación de esta magnitud por más de seis meses, que es lo que esperan las proyecciones", dijo en Diciembre Merrit Kennedy a Tim O'Connor, director de California Oil and Gas at the Environmental Defence Fund. "Cuando usted está pensando en unos 50.000 kilogramos por hora y el impacto climático de eso, es como abrir todas las refinerías de lado a lado en California".

Bajo el nuevo estado de emergencia declarado, el gobierno puede establecer una nueva cadena de mando para hacer frente a la fuga y ampliar su supervisión de las estimaciones de calidad del aire y de la fuga.

Aquí está el texto completo de la declaración de emergencia.