El comercio ilegal de vida silvestre es solo una de las amenazas que afectan a los leones y sus cachorros
Han pasado apenas seis meses desde la matanza y mutilación de seis leones en el sector de Ishasha del Parque Nacional Queen Elizabeth de Uganda (QENP).
Si visitaras el parque, verías a estos llamados leones de Ishasha holgazaneando en la miríada de ramas de imponentes higueras. Este grupo es una de las dos únicas poblaciones de leones que se sabe que trepan a los árboles, lo que hace que las majestuosas criaturas sean un tema fascinante de estudio y una popular atracción turística.
Lamentablemente, sin embargo, estos leones enfrentan numerosas amenazas, que incluyen la pérdida de hábitat, la captura, el conflicto entre humanos y vida silvestre, el comercio ilegal de vida silvestre y el tráfico de partes del cuerpo de leones.
Debido a estas amenazas, la población de leones de Ishasha incluye solo 69 individuos. Con las crecientes amenazas a esta entrañable fauna, los ingresos por turismo, que representan cerca del 8% del producto interno bruto de Uganda (al menos antes de la pandemia de COVID-19), también están amenazados. Para proporcionar las protecciones, la Lista Roja mundial de especies amenazadas que mantiene la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) ha etiquetado a esta población como "vulnerable" a la extinción. La lista nacional de Uganda los coloca en la categoría de "en peligro crítico".