"Estaba en el Parque Nacional Kruger. Era una mañana fresca, alrededor de las 6:30 a.m., justo al norte del campamento de Mopani, y mi grupo de safari y yo estábamos emocionados, esperando ver algunos de los animales salvajes de África".

"A medida que conducíamos por las carreteras del parque, nuestra expectación crecía. La emoción de no saber lo que puede haber a la vuelta de la esquina era cautivadora. Tan pronto como tuve ese pensamiento, nos encontramos con un león macho cruzando casualmente el camino. Caminó hasta un pequeño charco. Para nuestra sorpresa, otros dos leones aparecieron de la nada y se unieron a él: un macho más joven y una hembra. Aparentemente estaban disfrutando de un pacífico momento de convivencia".

"Sin embargo, la tranquilidad duró poco. Nuestra atención se centró en una elefanta hembra adulta que emergía de la espesura delante de nosotros. Parecía estar en apuros y cruzaba la calle a toda prisa. Lo que no sabíamos en ese momento era que había dejado atrás su vulnerable cría".

"Los leones, sintiendo una oportunidad, salieron al camino y pronto se dieron cuenta de que la madre elefante había dejado atrás a su cría. El león macho más joven tomó la iniciativa en perseguir al indefenso bebé elefante. Por el contrario, el león macho mayor se quedó de pie y observó, mientras que la leona tampoco parecía interesada".

Fue un emotivo momento cuando el bebé elefante se quedó confundido, contemplando si escapar o enfrentarse a los leones. Los leones lo intentaron varias veces, pero el elefante bebé se giraba para mirarlos cada vez. El pequeño demostró un coraje y una valentía notables. Los leones, a pesar de su ventaja numérica y de sus años de experiencia, no consiguieron atrapar a la cría.

El enfrentamiento continuó hasta que los leones finalmente se dieron por vencidos, aparentemente convencidos de que no podrían dominar al joven elefante.

"En mis seis años de visita al Parque Nacional Kruger, nunca había presenciado algo como esto. Incluso nuestros guías experimentados de Leo Vantage quedaron asombrados y admitieron que nunca habían visto leones persiguiendo a un elefante bebé durante todo su tiempo en Kruger".

"Si hay un consejo que les daría a mis compañeros entusiastas de los safaris, es que tengan paciencia y se comprometan con el avistamiento. A menudo, la naturaleza recompensa a quienes esperan. Si bien este encuentro en particular se desarrolló rápidamente, estábamos preparados para quedarnos el tiempo que fuera necesario para presenciar tal espectáculo".

"No fui el único que filmó este extraordinario evento. Había dos guías y otros cinco invitados con Leo Vantage, todos los cuales pueden dar fe de la rareza e intensidad de este momento. Recuerde, darles espacio a los animales y no presionarlos permite que escenarios tan extraordinarios se desarrollen de forma natural".