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Luego lucha contra unos chacales por la posesión del cadáver de la serpiente
En caso de que estuvieras buscando la confirmación de la legendaria resistencia del tejón de miel, este vídeo de un enfrentamiento depredador filmado en Botswana debería ser suficiente...
La impactantes imágenes fueron filmadas a principios de este año por Roselyne Kerjosse durante un safari en el Parque Nacional Chobe. Al comienzo del clip, el tejón parece perdido. Atrapado en la retorcida presa de una gran pitón, el inmóvil ratel parece poco probable que logre escapar. Afortunadamente para el tejón, la ayuda llegó en la inesperada forma de un par de chacales de lomo negro que se movieron para investigar la conmoción. Momentáneamente distraído por un chacal chasqueante, la pitón soltó su agarre lo suficiente como para que el tejón se liberara.
Aparentemente sin inmutarse por su casi asfixia, el tejón de miel rápidamente se puso a trabajar acosando a la pitón, con un poco de ayuda involuntaria de los chacales que también estaban interesados en la considerable comida. Ninguno de los depredadores estaba dispuesto a dar marcha atrás y pronto se libró un tira y afloja entre el chacal y el tejón con la desafortunada serpiente representando la parte de la cuerda. Parece que el tejón finalmente tuvo éxito después de arrastrar su cuerpo a un arbusto donde podría comerlo en paz.
Los hábitos nocturnos del tejón de miel y su tamaño razonablemente pequeño pueden dificultar su detección en la naturaleza. Vislumbrar uno es un raro placer y ver a un tejón envuelto en una batalla total por la posesión de un cadáver de pitón es muy especial. Además de su inigualable valor, los tejones también tienen una gruesa y mullita piel que es difícil de penetrar para los depredadores, por lo que tanto la serpiente como los chacales tuvieron problemas para agarrar al astuto carnívoro.
Todo, desde escorpiones y topos hasta geckos ladradores, puercoespines y, por supuesto, serpientes, se encuentran en el menú de los tejones de miel (sin mencionar las ocasionales delicias horneadas). Fieles a su nombre, los tejones también atacarán nidos de abejas en busca de miel usando sus penetrantes glándulas anales para fumigar la colmena antes de desgarrarla con sus fuertes garras. Sin embargo, no es solo la miel la que atrae a los astutos omnívoros, sino que también se aprovechan de la jugosa larva de abeja.
Los tejones a menudo son perseguidos por otros depredadores oportunistas, como los azores y los chacales, que buscan obtener una comida fácil. Otro depredador juego de tira y afloja estalló en agosto de este año en el Parque Transfronterizo Kgalagadi cuando un tejón de miel atrapó una ardilla y no estaba dispuesto a compartir su premio con un chacal.
