Desde los albores de la era espacial, los planificadores de las misiones han tratado de seguir una regla simple pero importante: No te metas en los cinturones de Van Allen. Las dos regiones con forma de rosquilla alrededor de la Tierra están llenas de "electrones asesinos", ondas de plasma, y peligrosas corrientes eléctricas para los viajeros espaciales humanos y sus nave espaciales. Cruzarlos no es una buena idea. Esto en cuanto a las viejas reglas. Pero ayer la NASA lanzó dos naves espaciales directamente a los cinturones de radiación - y esta vez planean quedarse un rato.
Las sondas de la NASA Radiation Belt Storm Probes despegaron de Cabo Cañaveral el 30 de agosto de 2012. Las naves repletas de sensores y fuertemente blindadas realizarán una misión de 2 años para descubrir qué hace que los cinturones de radiación sean tan peligrosos y diabólicamente impredecibles.
"Hemos sabido de los cinturones de Van Allen durante décadas y sin embargo continúan sorprendiéndonos con las tormentas inesperadas " electrones asesinos" y otros fenómenos, dice el científico de la misión David Sibeck, "Las sondas Storm Probes nos ayudarán a entender lo que está pasando ahí fuera". Saber más: The Radiation Belt Storm ProbesRadiation Belt Storm Probes (RBSP)Probing the Electric Space Around Earth